Café Thibon, bar notable con 85 años de historia
La Ciudad de Buenos Aires, Argentina, tiene un grupo selecto de más de 80 cafés y bares denominados “Notables” que forman parte oficial del patrimonio cultural de la ciudad y se los considera como tal por su antigüedad, tradición, valor arquitectónico y/o cultural, y que fueron el punto de encuentro de importantes personajes de la historia argentina, y espacio de debate o lugares de tertulia de actores y políticos.
Uno de ellos es el café Notable Thibon, ubicado en la calle Montevideo 723, en el barrio porteño de Tribunales, que fue fundado en 1935 por la familia Thibon, originaria de Ardêche- Francia, donde se dedicaba al cultivo de la vid. En 1938 se inauguró como local de venta de café tostado y molido a la vista.
Lo que primero llama la atención es su colorida vidriera repleta de especias, frascos, teteras, pimenteros y productos regionales que le aportan calidez al local. El ambiente combina un espíritu entre elegante y bohemio y un estilo tradicional. Hay más de 50 variedades de tés entre importados y los que se producen en el lugar con mezcla de flores, frutas y especias, que también se pueden comprar para llevar a la casa. Además, hay 8 variedades de cafés que se compra crudo y se tuesta en el local.
Después de la pandemia, el Café Thibon fue remodelado por los dueños de otro famoso bar notable como “El Gato Negro”, ubicado a unas pocas cuadras. La renovación incluyó un gran trabajo de puesta en valor de su arquitectura, conservando su espíritu y decoración tradicional.
El café abre de lunes a viernes de 8 a 19 horas, y además de la gran variedad de cafés y tés especiales, tiene una oferta gastronómica que va desde desayunos y meriendas con pastelería y originales sándwiches, hasta ensaladas gourmet y riquísimas bruschetas para almuerzos frugales con platos simples y sabrosos. También se incorporaron productos gourmet, vinos, champagne y licores selectos.
Después de haber disfrutado de una buena taza de té y unas riquísimas masitas dulces, este redactor volvió caminando a su hogar con una enorme sonrisa en su rostro ¿Por qué será?
Por. Douglas Mac Donald
Fotografía: Douglas Mac Donald